martes, 4 de octubre de 2011

One Shoot: El amor...¿Existe?...


PVO ELENA

Mi vida pasaba ante mis ojos, sin realmente encontrar lo que me llenaba, 
Todo lo que me había propuesto alcanzar en esta vida lo he echo, tengo dinero, 
Familia, carros, un buen trabajo, una casa, amigos.... ¿Pero porque sigo sintiéndome hueca?...
¿Porque siento que aun no encuentro mi lugar?... ¿Donde esta mi lugar?... ¿Que no es aquí
Al lado de la gente que quiero?....

-Elena-. Llamo mi atención mi amiga Bonny, hoy estábamos almorzando (como cada jueves), en casa de la abuela de mi amiga, la Sra. Bennett era una gran mujer con unos ojos llamativos y sonrisa sincera.

-¿Si?-. Conteste intentando sonreír, ya hacia mucho que ese pensamiento rondaba mi cabeza inquietándome día  y noche.

-Últimamente te noto distante, como buscando sin lograr encontrarlo-. Dijo Bonny mirándome con preocupación, mientras me daba una palmadita en el hombro.

-Lo sé Bonny, es solo que siento que algo me hace falta-. Dije en un suspiro mientras me terminaba el último bocado de mi ración de puré de papa.

-¿Quieres más querida?-. Dijo la abuela de Bonny caminando hacia nosotras con un molde con un poco de puré.

-No, muchas gracias, estuvo todo delicioso-. Dije tomando mi plato y levantándome de la mesa, para llevarlo al lavatrastos.

Después de una corta platica con la Sra. Bennett, Bonny decidió que iríamos a dar una vuelta por los alrededores de su casa, intentando distraerme, lo cual agradecí infinitamente.

-Elena para mí que lo que te hace falta es amar a alguien-. Dijo mi amiga mientras caminábamos por el bosquecillo atrás de su residencia.

-Tengo mucho amor, de mis padres, mi hermana, de ustedes mis amigas-. Contesté rápidamente, casi sin pensarlo, era obvio que estaba rodeada de amor.

-Claro, claro, pero no me refiero a ese tipo de amor, yo digo el de pareja, un novio Elena-.Aclaró Bonny mirándome con ternura, reí amargamente.

-El amor... ¿Existe?-. Pregunté con los ojos rasados de lágrimas, desde aquella ocasión en la que me enamoré de Stefan Salvatore, no había vuelto a creer en el amor... ya que duro tan poco...

-Si existe, y lo haz conocido Elena, pero por una sola vez que no duro mucho tiempo no significa que no exista, ni lo puedas volver a encontrar, ¿Sabes?-. Dijo Bonny, ella era una chica muy intuitiva y de un corazón gentil, siempre dispuesta para ayudar a los demás, era mi mejor amiga desde que tenía memoria, casi como mi hermana.

-Espero-. Dije en un murmullo mientras caminaba hasta un árbol de raíces salidas, que simulaban bancos naturales alrededor del árbol.

-Ya lo veras-. Dijo animosa, con una enorme sonrisa, como cuando sabia que algo iba a suceder... cuando ella tenia un presentimiento casi siempre, curiosamente se cumplía, así que al ver a mi amiga solo rodé los ojos... algo bueno viene.... pensé para mis adentros.

-Ya me debo ir, mi abuela se puede preocupar, nos vemos mañana-. Sonrió Bonny, dándome un abrazo y corriendo de regreso a su casa, yo seguí sentada ahí por un largo rato más hasta que pequeñas gotas de lluvia comenzaron a caer en mi rostro.

Apurándome me levante, y camine a paso presuroso hacia mi casa, (cuando Bonny y yo éramos niñas, habíamos descubierto que si caminábamos en línea recta y luego a la derecha desde su casa y seguíamos derecho llegábamos mas rápido que caminando por las calles de Mystic Falls.

-¡Ely!-. Grito mi hermana Margaret bajando a saltitos la escalera, para después aventarse a mis brazos.

-Hey, Margaret-. Le dije cariñosa a mi hermanita, sosteniéndola en mi regazo, mientras caminaba con ella en brazos hacia la cocina, para saludar a mis padres.

-Bienvenida hija-. Dijo mi mama con una gran sonrisa, mientras comenzaba a picar verduras para hacer la cena.

-Hola mama-. Dije alegre de verla, mi madre viajaba muy seguido por ello casi no convivíamos y cuando estaba aquí, era muy bueno tenerla a mi lado para aconsejarme, siempre tenia una palabra de aliento para los demás.

-Ely, vamos a ver mis dibujos, ¿Si?-. Dijo Margaret soltándose de mi abrazo y jalando mi mano hacia las escaleras.

-Vamos pues-. Dije sonriendo, mientras mi mama reía ante mi cara de diversión.

-Mira-. Decía emocionada mi hermanita con las mejillas marcando unos pequeños hoyuelos por la gran sonrisa que adornaba su rostro.

-Todos son muy lindos Margaret-. Dije tomando uno de los dibujos que mas llamo mi atención, eran las manos de dos personas, un hombre y una mujer entrelazadas con un fondo azul claro, simulando el cielo... no se porque, pero aquella imagen  me arrebato una sonrisa.

-Puedes quedártelo-. Dijo mi hermana al notar que yo estaba embelesada en su dibujo.

-Gracias Margaret, voy a mi cuarto a ponerlo sobre mi escritorio, si necesitas algo me hablas, ¿vale?-. Dije caminando hacia el baño, el cual comunicaba hacia mi recamara.


-Si-. Dijo sumergida en una pila de dibujos, colores y libros de cuentos. 


Camine hacia mi habitación sin mucha prisa, en cuanto llegue deje el dibujo sobre mi escritorio, mientras observaba la lluvia por la ventana, pensando en la platica que había tenido esta tarde con Bonny, no tuve mucho tiempo para pensarlo ya que
antes de poder aclarar mi mente, escuché la voz de mi mama llamándonos, al pie de la escalera:


-¡Elena, Margaret!, ya llego su padre es hora de cenar-. Escuche el portazo de la puerta contigua y los rápidos pasos de mi hermana pequeña al correr por la escalera, reí... mi hermanita tan animosa.


-¡Ya voy!-. Grite bajando a zancadas la escalera.


-Buenas noches papa-. Dije dándole un beso en la mejilla a mi padre, mientras recorría hacia atrás la silla contigua a la de mi hermana.


-¿Que tal su día?-. Pregunto mi mama.


-Bueno, mucho trabajo-. Contesto papa cortando un pedazo de carne que había guisado mi mama.

-Me alegra querido-. Dijo mi mama sonriéndole a mi papa, y dándole un leve apretón a su mano, para después mirar a Margaret y añadir: -¿Y el tuyo pequeña?-.



-Divertido, hoy nos enseñaron muchas cosas sobre las fracciones y luego hicimos un cuento para Español, y el mío fue el más bonito, entonces por eso lo pego la maestra al frente del salón y todos pasaban a leerlo.. y... y... ya-. Decía muy alegre mi hermana atropellando unas palabras con otras de lo rápido que las pronunciaba.


-¿ Y tu día Elena?-. Pregunto mi padre, al notar que solo me había limitado a comer.


-Bien, el Instituto fue muy sencillo, después comí con Bonny en casa de su abuela como cada jueves y fuimos a dar una vuelta por el bosque-. Dije soltando inevitablemente un suspiro.


-¿Que tienes?-. Pregunto Margaret con sus ojitos llenos de preocupación.


-Nada cielo, solo estoy algo cansada-. Dije intentando sonar convincente, ¿Como le iba a explicar a una niña de 8 años que me sentía triste porque no tenía novio?.


-Vale-. Dijo dándome un beso en la mejilla, el resto de la cena la pasamos riendo por uno que otro comentario de Margaret, bromas de papa o regaños de mi madre por las bromas de papa, cuando terminamos y lave mis trastos dije:


-Quiero ir a dar una vuelta, ¿Puedo ir?-. Pregunte esperanzada, de repente deseosa de caminar un rato bajo la luz de luna.

-Si, pero con cuidado Elena-. Dijo mi mama mientras yo tomaba mi cazadora.

-Siempre-. Dije sonriendo, tomando mi guitarra y caminando hacia la puerta corrediza de la cocina que daba con el jardín, camine hasta que el jardín se acabo y empezó el bosque, aun no sentía que había caminado lo suficiente así que seguí hasta quedar en medio del bosque en un claro, donde al centro solo había un gran Abedul.

Tranquila camine hacia el y me senté bajo su gran sombra,  después de un rato de pensar quise tocar algo de guitarra, la puse sobre mi regazo y cuando menos lo pensé, comencé a cantar:

-¿Que será esta voz que nos habla desde aquí en el centro del pecho?...

¿Que será esto que me provoca y también ilusiona y me atrapa?-. Canturree distraídamente… de repente de entre los arbustos enfrente mío, bajo la luz platinada de la luna regalándome la mejor vista que pude ver en toda mi vida, salió un chico de aparentes 18 o 19 años, alto, blanco, algo musculoso, cabello marrón quebrado, ojos verdes  con una mirada cálida y sincera, cuando me vio sonrió y comenzó a cantar en respuesta a mi anterior estrofa:

-Es un mandato de Dios,
Que me hizo el favor de ponerte en mi vida
Es sortilegio de Amor
Es milagro de dos… un encuentro de almas-.  Lo miré maravillada, tocando inconscientemente a la par de su voz, que guiaba mi mano con las suaves notas implícitas en su voz terciopelo.

-¿Que será lo que no hace eternos y además, da sentido a la vida?...
¿Que será esto que no hay palabras y  además no se ve ni se toca?-. Pregunte en un canturreo, el me miro y camino de poco en poco hasta llegar a mi lado y sentarse junto conmigo.

-Es un mandato de Dios,
La expresión de su voz en la forma perfecta
Es sortilegio de amor
Es milagro de dos…un encuentro de almas…-.  Contesto como embelesado… me miro durante unos segundos hasta que estiro lentamente su mano hasta acariciar delicadamente mi mejilla, lo mire y le di una gran sonrisa mientras que mi corazón  latía a prisa como las alas de un colibrí.

-Es un mandato de Dios,
La expresión de su voz en la forma perfecta
Es sortilegio de amor
Es milagro de dos… un encuentro de almas-. Ambos comenzamos a cantar el estribillo a la par llegando así poco a poco al culmine de la canción….

-Es...-. Canturreo bajito sonriéndome.


Nos quedamos cayados durante unos minutos, tal vez mas, solo mirándonos… de poco en poco sentí como mi corazón  se llenaba de esperanza y gozo… había llegado, el era el indicado… ahora lo sabia…


-Tanto tiempo esperándote, tanto buscarte y al fin te encontré-. Dijo sonriendo.


-No sabes el tiempo que te eh soñado-.  Dije mientras lo pensaba, a su lado sentía como encontraba mi lugar en el mundo … como por fin estaba totalmente completa.


-¿Cómo te llamas?-. Preguntó el chico de ojos verde aceituna.


-Elena-. Dije sonriendo, me tendió su mano la cual tome, jalo de mi mano hasta que quedo lo suficiente cerca de su boca como para depositar un corto beso en el dorso.


-Soy Urs-. Dijo sonriendo mientras soltaba mi mano.


Desde esa noche, yo quede completa e irrevocablemente enamorada, cada día que transcurría a su lado me enamoraba un poco  más (aunque  no sabia si era posible amar le más de lo que ya lo amaba)… cada gesto, cada sonrisa, cada charla… nos unía más y más…


Un día cenando en casa de mis papas, Urs alzo la copa y dijo:



-Quiero proponer un brindis, por Elena la mujer de mi vida…-. Dejo su copa en la meza, se arrodillo frente  a mi, saco una caja de su bolsillo, tomo mi mano izquierda y continuo: -Elena… te ame incluso antes de encontrarte, te amo y te amare ahora y siempre, ¿Me darías la maravillosa oportunidad de ser mi esposa?-. Dijo sacando el anillo de la caja.


De mis ojos comenzaron a caer lágrimas de gozo, ahora comprendía que todo tiene un momento para pasar, y que el amor si alguna vez dude que existiese.. Si existía y estaba presente siempre a nuestro lado…


-¡Sí!, claro que si, te amo-. Dije abrazándolo llena de gozo, Urs puso el anillo en mi mano y me dio un beso lleno de amor y comprensión… mis padres y hermana rompieron en aplausos, felices ante al acontecimiento…


Ahora estaba con el hombre que amaba, y nada ni nadie nunca nos separara…
Mi lugar estaba aquí con Urs, con mi familia con  mis amigos… mi lugar estaba donde esta mi corazón….

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 Bueno mis niñas, este es un OS, que escribi el otro dia escuchando esta bella y poetica cancion,
ahora tras muchas cosas sucedidas este año aprendi esto, el amor llega en el momento
que menos lo esperas, porque es en ese momento cuando lo necesitas.

Espero les guste, y me dejen sus bellos comentarios, que me iluminan dia a dia.
Un abrazo a mi Anto, mi niña sigue adelante, sigue luchando estoy y estare siempre contigo hermanita, te amo!, Angel preciosa, te extraño amigaaaa!!; sos muy dulce por todo lo que me haz escrito en el anterior post, gracias, tu tambien eres una persona maravillosa amiga mia!.

 La cancion es Sortilegio de amor de IL DIVO.
Besos.
Yessi*.*

1 comentario:

ܤ Dulcinea dijo...

Hermosa, recien me doy con este one-shoot... dios, casi lloro u.u
El amor llega cuando menos lo esperas, ilumina todos tus dias, te hace feliz, fuerte, te hace volar por las nubes sin caer,porque sabes que si decaes, estara esa persona amada esperandote con los brazos abiertos de par en par...
Dios que bello one-shoot, pense por un momento que el chico era Stefan, y ubiese sido muy bello, pero este chico es muy tierno y te quedo de maravilla!
Te amo hermana